Una semana antes, nuestro Equipo Directivo le había invitado. Una invitación que el alcalde aceptó generosamente desde el primer momento. Quién mejor que el regidor para explicarnos la Historia de la configuración geográfica de nuestro Municipio.
“De haber seguido como hace 150 años, hoy seríamos el segundo ayuntamiento de Cantabria, con 75.000 habitantes”, comenzó así su charla o conferencia. Camargo pertenecía a uno de los nueve valles que se rebelaron contra los “señores feudales” ante el Rey en el Pleito de los nueve valles. De ahí que nuestro Municipio sea Real Valle, como otros ocho en Cantabria.
“Llegábamos hasta San Juan de la Canal y también hasta Guarnizo. Astillero no existía”. Los armadores de barcos eran una élite con mucho poder ante el Rey quien les dio un fuero especial, como la exención de impuestos, por ejemplo.
Ángel Duque nos habló en este punto de los rellenos, que eran concesiones del Rey para trabajarlos. Uno de ellos, sin ir más lejos, es la Granja de Alday. Unido a ello, también tiene que ver el tercer tramo ferroviario que se diseña y hace en España, el de Alar a Santander, dado que el Rey quería venir desde allí a Santander.
Pues bien, esa concesión de mar para los armadores y constructores valía cero pesetas. Así tenemos el último relleno que se ha hecho en las marismas, el segundo atraque mayor de España sobre el mar, el del polígono de Raos. El alcalde explicó que los rellenos pueden ser por dos motivos, bien el de la especulación, o bien el de la prestación de servicios.
Resumiendo, si ahora Camargo viene a tener 36 km2, hubo un tiempo en que tenía una superficie de 50, que el Municipio lo configuraban 10 pueblos o Juntas Vecinales, dos más que ahora. Haciendo historia, en 20 años -desde el 83 hasta ahora- hemos duplicado la población de camargueses, y “si ahora somos 32.000 habitantes, en 10 años queremos llegar a los 40.000”, sentenció el alcalde.
Finalizando su lección a los escolares, llamó la atención del deterioro de nuestra costa, por la ambición en la búsqueda de terrenos llanos y baratos, cuando ese terreno de marismas es “una fuente de vida intermareal”.
Tampoco dejó pasar la presencia del aeropuerto, un cuerpo extraño en los años 50, un regalo de Franco a los americanos. Como alcalde, explicó a los niños la necesidad de una planificación del desarrollo con todos esos condicionantes, en cuanto a carreteras, ríos -como los de Bolado y Collado-, vías y aeropuerto.
En fin, la visita del alcalde y el encuentro con los mayores del Colegio fue interesante, y así dejaron constancia de ello los propios escolares con el bombardeo de preguntas que le hicieron y el interés que demostraron.